ECO-ENGAÑO por Geraldine Zambrano

Tengo una agenda de actividades la cual suelo poner al día todas las noches. El domingo 26 de abril solo tenía una actividad al la cual quería asistir.

Tratándose de la semana ecológica, de la tierra, del ambiente o como quieran llamar a esta semana propuesta de algún modo para la conservación y su divulgación, muchas instituciones, medios y personas en general se sintieron entusiasmadas con la idea de ser mas “verdes”.

Mi sorpresa fue, que más de la población la cual esperaba que participara, lo hizo en realidad (en hora buena) y por esta razón, mi agenda se apretó.
Por supuesto no pudo faltar el domingo para culminar con broche de oro, pero esta ultima actividad fue todo un engaño…

Se trata del ECO-BAZAR… les suena??
Otra “verde” propuesta, (que de verde no tenía nada, mucho menos de ECOLÓGICA), me motivo mucho a asistir porque se trataba de un bazar en donde se promocionaban y vendían artículos de diseñadores independientes y emergentes de Zulia y es necesario apoyar el talento regional, y mas aún cunado la ecología y el comercio justo están por el medio.

¿Comercio justo? ¿Ecología?... si ECOLOGIA, eso que para estos dias esta de moda y que en ese espacio se respiraba como la verdadera tendencia disfrazada del consumismo.

Decidí ir en familia a disfrutar del evento en el cual participarían varios diseñadores y se llevaria a cabo en un famoso lugar al cual llamamos Rasta Bar. Tome a mi hija de 7 meses, arrastre a mi esposo conmigo cuando al fin llegamos, comenzo la batalla de las contradicciones:

80% de las personas que se encontraban en las afueras del lugar fumaban como si la ley que prohíbe cigarrillo estuviera en vigencia más ahora que nunca. (Normal, se les respeta)

Rasta Bar, es UN BAR, (valga la redundancia), obviamente la noche anterior hubo un fantástico rumbon, y ese lugar se encontraba en demasía con hedor a cigarrillo. Alquitrán concentrado en todos los rincones del lugar ¿ecológico?

Todos los artículos expuestos eran sintéticos. ¿Ecológico?

Nunca se hablo, ni se menciono nada parecido al cambio climático, ambiente, preservación de los recursos o reciclaje. ¿Ecológico?

Nada era reciclado, un poco mas para la cultura del consumo y desecho ¿ecológico?

Yo nunca pude entrar con mi hija, era obvio que no la iba a exponer al efecto nocivo del tabaco, no era una actividad para la familia a pesar de que habia niños en el establecimiento.

Aparte de todo esto dejaron claro por algunas de la invitaciones de facebook que seria gratis la entrada y no lo fue, bueno eso es lo de menos.

Respeto mucho el diseño independiente y me considero precursora de ello, pero para la organización de un evento ECO hace falta más que un nombre. Dejando claro que los participantes son solo participantes y su esfuerzo es tomado en cuenta, pero entre los organizadores ¿Cómo dejaron pasar estos INSIGNIFICANTES detalles?